Suscríbete a nuestro boletín de novedades y recíbelo en tu email.
Un estudio sobre esta apasionada y apasionante reflexión de Buster Keaton sobre el oficio del cineasta que es El cameraman, rodado en 1928, y que en apenas 69 minutos consigue mostrar todo el poder yla humildad de la imagen filmada, sin rebajar un ápice el humor y el romanticismo de sus films precedentes. TarÃn compara esta obra con los movimientos más vanguardistas y experimentales del cine y elsentido último que tienen las pelÃculas como retrato social y humano.