CONTABILIDAD FINANCIERA PARA DIRECTIVOS - Tecno-Libro

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El ciclo de capital invertido y la Contabilidad Financiera.
Los estados financieros.
La estructura de Balance.
El estudio del Balance: las inversiones del activo.
El estudio del Balance: los recursos financieros.
El modelo de Balance en el PGC 2007.
Lectura y análisis de los datos del Balance.
El cálculo del resultado de ejercicio.
Modelos de Cuenta de Resultados.
El modelo de Cuenta de Pérdidas y Ganancias en el PGC 2007.
el Plan General de Contabilidad 2007.
Anexos.
Términos financieros (inglés/español).

Esta 7ª edición del libro Contabilidad financiera para directivos es una revisión completa y actualizada de la anterior edición de 2009, adaptándola a las normas mercantiles del nuevo Plan general de contabilidad-PGC y de Pymes 2007.

Por el RD 1514/2007 de 16 de noviembre se aprobó un nuevo PGC, de obligatoriedad para todas las empresas, y un PGC para medianas y pequeñas empresas o Pymes, también mediante RD 15/2007 de 16 de noviembre. Estos dos planes contables suponen una adaptación de nuestra normativa contable a las Normas Internacionales de Contabilidad conocidas por las siglas NIC-NIIF (Normas Internacionales de Información Financiera). Normas que tienen por finalidad la adecuación de la información que las empresas emiten anualmente (las Cuentas Anuales) a una armonización contable internacional, dentro de un mundo económico globalizado y por presión de los mercados financieros internacionales.

La normativa mercantil desarrollada en el PGC 2007 supone un cambio de filosofía en relación con la contabilidad como sistema de información económica. Este plan contable incorpora no sólo una nueva estructura de las Cuentas Anuales, de las que el Balance y la Cuenta de Pérdidas y Ganancias son objeto básico de este libro, y un cambio en las normas de valoración, sino también un Marco Conceptual de la Contabilidad que nos obliga a todos los profesores universitarios a un replanteamiento de cómo exponer la Contabilidad Financiera a directivos no financieros. Se ha roto así con la tradición contable europea, y por tanto también española, de cómo plantearse financieramente la exposición del Balance como documento de síntesis de la situación patrimonial y financiera de las empresas.