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Daniel Navas lleg? desde un pa?s de exuberante naturaleza, donde el sol se derrama ciego de p?rpados. Sus poemas despiertan el vocabulario con el que nos imaginamos los lugares ex?ticos donde se pronuncia con naturalidad: manglar, tamarindo, guacamayo . Pas? su juventud por tierras de Transilvania, y su poes?a saborea los recuerdos de esa tierra de hoja verde fugitiva . Daniel practica tanto lam?trica como el verso libre y de manera singular en la composici?n de poemas con estrofas, a modo de haikus, ... que con maestr?a ha sabido trasladar al lenguaje y al tempo occidental: Y la pronuncio/ aire, se ha ido en el aire / queda su arena .