Suscríbete a nuestro boletín de novedades y recíbelo en tu email.
España a finales del siglo XVIII esta mejor administrada que a principios de la centuria entre otras razones, porque se producen importantes modificaciones en el seno del poder. No puede decirse que las viejas fuerzas sociales, especialmente la alta nobleza, queden arrinconadas. Pero esta muy claro que a su lado, y a veces frente a ellas, toman posiciones nuevas categorias sociales que reivindicanun cierto protagonismo, a veces un alto protagonismo en la administracion del estado y, por ende, en el poder. Lo que conlleva inevitablemente a nuevas correlaciones de fuerzas en el seno de las instituciones y, a veces, a la modificacion de las mismas.