Suscríbete a nuestro boletín de novedades y recíbelo en tu email.
El Pequeño Saúl no es un pirata como los demás. Es más bien bajito, le gusta repartir dulces y tiestos con flores, se ha tatuado un conejo en el brazo y prepara un pastel de piña delicioso. El PequeñoSaúl está hecho para cantar canciones de mar, no para blandir una espada. Hacerse el duro no va con él.