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âPolicÄn la ha hecho buena! El alcalde, que no aguanta ni media, le ha despedido. PolicÄn devuelve su placa y se marcha, pero, aunque haya perdido su trabajo, no ha perdido la esperanza... âni los amigos! Y asÍ, Periquillo y TDAH le fabrican un disfraz de poli gatuno con el que se vuelve a colar en la comisarÍa, junto a su amado Jefe. áLograrÄ nuestro hÉroe salir del agujero y recuperar su lugar? áConvencerÄ al alcalde (y a su querido oso de peluche, el seÛor Cocochito) de que sus cualidades son mucho mayores que sus manÍas? áY lograrÄ el gato Perico sobreponerse al fin a los traumas de su infancia y poner las cosas claras al sinvergÔenza del Abuelo?... âYES, WE CANINO!